viernes, 6 de noviembre de 2009

Parole parole parole

Las palabras siempre están; vienen y van, sí, pero nunca desaparecen realmente. Incluso cuando uno hace silencio durante no sé cuánto tiempo o cuando no sabe qué corno decir ahí estan, aparecen de la nada para aclarar la situación —como si quedara alguna duda—, "¡no sabés que decir!" dicen (y me faltó la risa maléfica que agregan a veces).
Hay quienes le piden a uno que hable, que por favor diga algo, porque no soportan el silencio, y hay otros que le insinúan que la falta de comunicación, digamos, no le va a representar un problema.
Ahora bien, hablar constantemente no es necesariamente comunicarse (¿alguien vió esa pelicula?), eso se lo entiende bastante bien. Pero viendolo desde el otro lado, no es necesario esperar a tener algo interesante y útil que decir para abrir la boca y pronunciar una palabra. Si fuese realmente así nadie hablaría de fútbol o cualquier otro deporte, de alguna película que acaba de ver, y la lista se iría acortando sola, hasta el punto en que no podemos contar siquiera cómo nos fue anoche, ayer en la facultad o el otro día cuando caminaba por la calle y me crucé a este tipo vestido de payaso..., porque seguro que no va a ser algo que no hayamos escuchado o vivido ya en otro momento. Por lo tanto esa información deja de ser útil. O sea, todo muy lindo flaco pero si ese payaso no salió volando de repente, no me cuentes más. (Sobre este tema tengo algo más que "aportar", sí, entre comillas, pero lo dejo para otro posteo, ya verán).
Por el otro lado, no se puede negar que muchas veces lo mejor que podemos hacer es cerrar la boca y hacer silencio. Pero no tengo que recurrir a esos momento para probar algo. Es más, no tengo nada que probar jeje. Pero lo que sí quiero decir es que no tiene por qué ser incómodo el silencio. Ok, sí, hay casos, muchos, en que sí lo es, pero eso no es para que generalicemos y que TODO silencio pase a ser desagradable.
Claro, fijense sino, paren en una esquina cualquiera y escuchen. Autos, gente, perros, ruidos por allá, bocinas por acá, ¡hasta los pájaros hablan! Así que de vez en cuando uno hace silencio, ¿esperando escuchar al otro?, nooo... jejeje sí, está bien, pero no siempre. Uno muchas veces busca el silencio mismo. Aportar silencio. Lástima que el silencio, desde que tengo memoria al menos, no es sino la ausencia de sonido. Así que cómo podemos aportar algo que ni siquiera es.
Bueno, ya se me ocurrirá algo. O alguno de ustedes sabrá cómo hacerlo y me lo dira  —siempre y cuando no me digan que la haga simple y me calle la boca, porque eso no funciona realmente, después de todo en este momento, mientras escribo esto, no estoy hablando y sin embargo...
Je je je. Como dije antes, las palabras van y vienen pero nunca, ni siquiera cuando así lo creemos, desaparecen.

6 comentarios:

Analía dijo...

A ver, "los sonidos del silencio" - "Y en la luz desnuda ví
Diez mil personas, quizás más.
Gente hablando sin conversar,
Gente oyendo sin escuchar.
Gente escribiendo canciones que las voces jamás compartirán
Y nadie osó molestar a los sonidos del silencio.
..."
shhhh necesito un mate

Vero dijo...

Estas filosófico hoy Nico...

A ver, los silencios pueden ser muy agradables, no tienen porqué ser incómodos.
Es más, hay cosas para las que es mejor el silencio, como una mirada, o un abrazo... si hablás la cagás.

Buen mate :)

Nicolás dijo...

Corro corro yyy llegooo..

Ana: Muy bueno, "nadie osó molestar a los sonidos del silencio".
Tuve que meterme a san gugl (qué buen inglé locooo) para enterarme que es una canción de S Denis. Ay ay... jajaja

Vero: ¿Filosófico? ¿así le dicen ahora?
Y si, si hablo la cago, así que

Un abrazo de color verde

Vero dijo...

¿De color verde? ¿A qué huele? :)

Diego dijo...

Los árabes (tipos a veces muy sabios) tienen un refrán que dice: "Si lo que tienes que decir no supera en calidad al silencio,entonces cállate." Yo adhiero en general a eso. Respeto mucho al silencio, y trato de interrumpirlo lo menos posible. Digamos sólo cuando tengo algo para comunicar (por interesante, por bello, por desahogo, etc.), y no sólo porque sí.

Música para la ocasión: Enjoy the Silence - Depeche Mode

Nicolás dijo...

vero: como el amarillo, pero mezclado primero con el azul...

diego: bastante claros los árabes. Yo lo intento pero no lo logro, jeje. Aunque el humor es una forma de desaogo, ¿no?

Muy buenos mates. Me voy a escuchar Depeche Mode..